Si os gustan las carnes con sabores agridulces os va a encantar este solomillo de cerdo con ciruelas y piña. Aunque es una carne un poco seca al ir rodeada de finas lonchas de tocino casero ya se le aporta cierta grasa y le da un sabor especial que hace que a la hora de degustarla esté mucho más jugosa.
Lo ideal es una vez horneado el solomillo triturar parte de los ingredientes para formar una salsa, dejando unas cuantas frutas como guarnición. Es importante que la salsa la veáis bien tostada aunque en vuestro horno tengáis que aumentar el tiempo de cocción.