Mostrando entradas con la etiqueta helados. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta helados. Mostrar todas las entradas

domingo, 14 de junio de 2020

Helado casero de fresas sin heladera, receta fácil y sin grasas

Siempre digo que me gusta más un cachivache de cocina que un caramelo a un niño, pero en cuestión de heladeras siempre me he resistido a comprar una. Y es que esta receta de helado casero de fresas sin heladera es el mejor ejemplo de que puede prepararse este estupendo postre de verano sin necesidad de complicarse con otro electrodoméstico.

La receta es de mi madre, lo cual ya es garantía de éxito asegurado. Cuando era niña, a mis hermanas y a mí nos encantaba este helado casero, sobre todo las tardes que venían amigas a jugar y sabíamos que nos esperaba una merienda especial. Además, lleva tan pocos ingredientes y es tan fácil de preparar que basta hacerlo una vez para engancharse con él. Estáis avisados: crea adicción.

domingo, 20 de mayo de 2018

Helado proteico de chocolate

Llega el verano y con él las ganas irresistibles de comernos un rico helado, pero... ¿y si además de saborear este rico manjar, nos inyectamos una buena dosis extra de proteínas? No se puede pedir más, así que no podéis perder nota de la receta que os traemos hoy.





Nuestro helado va a ser muy rico en proteínas con el fin de ayudar a llegar al mínimo recomendado de este macronutriente en nuestra dieta, que son de 2g por kg de peso si entrenas intensamente o 1,2g por kg de peso si entrenamos de forma más moderada (0,8g para gente sedentaria).

martes, 1 de mayo de 2018

Helado ligero de melocotón y queso fresco. Receta

A veces digo medio en broma que en verano podría alimentarme sólo a base de fruta, por la variedad que tenemos y lo muchísimo que me gusta. Lo cierto es que la gran mayoría de mis comidas la incorporan de alguna u otra manera, y también es perfecta para recetas refrescantes como este helado ligero de melocotón y queso fresco.

La idea que tenía en mente era preparar un sorbete con unos melocotones hermosos que me habían regalado, de esos que huelen a gloria sólo con verlos. Después pensé en añadirle un toque más cremoso sin sumarle mucha grasa, así que recurrí al queso fresco batido desnatado, que además me sienta bien por los fermentos lácteos que contiene, como el yogur.