Si hay una de las comidas del día que me da pereza preparar, esa es la cena. Normalmente llego a ella tan cansada, que si no fuera por mi familia cenaría únicamente un yogur. Pero como eso es una aberración desde el punto de vista nutricional, para esas ocasiones en las que no queréis complicaros la vida os propongo esta receta de montaditos de ibérico, calabacín y pesto.
La salsa pesto es la preferida de mis hijos, y como se prepara en un plis plas suelo hacerla bastante a menudo. A nosotros nos gusta fuerte y algo espesa, por eso no suelo triturar demasiado los ingredientes, vosotros variad las proporciones a vuestro gusto, que para eso es vuestra cena.